<p>Las mujeres dominan el pop a nivel mundial y las mujeres han dominado la segunda edición de los Premios de la Academia de la Música, que esta noche se han repartido en una gala celebrada en el Palacio Municipal de Ifema, en Madrid, y retransmitida por La 2 de TVE.</p>
Esta noche, Nathy Peluso ha dominado de manera abrumadora en las categorías urbanas y de rap con los cuatro premios: Mejor Álbum Urbano, Mejor Canción de Rap, Mejor Canción Urbana y Mejor Fusión Interpretación Urbana
Las mujeres dominan el pop a nivel mundial y las mujeres han dominado la segunda edición de los Premios de la Academia de la Música, que esta noche se han repartido en una gala celebrada en el Palacio Municipal de Ifema, en Madrid, y retransmitida por La 2 de TVE.
Amaia Romero optaba a cinco premios con una sola canción, ‘Tengo un pensamiento’, y por esos dos minutos y 45 segundos ha sido reconocida con los premios a Mejor Canción del Año, Mejor Canción de Pop y Mejor Compositora del Año, que no es poco. «Esta canción salió de un sitio muy íntimo y personal y me emociona que haya podido llegar a tanta gente», dijo la joven artista navarra.
La canción de autor, un género que cotiza a la baja en las listas de streaming, ha tenido una representación significativamente importante, y ha sido, sobre todo, canción de autora. Con su sexto disco ya, ‘El abrazo’, Rozalén se ha llevado el gran premio de la noche, el de Mejor Artista del Año, que ha recibido llorando durante segundos y segundos. «Muchas gracias, no lo entiendo, no lo entiendo», ha podido decir por fin entre pucheros. «Ha habido mucho dolor detrás de este disco, me alegro mucho de que me cuidéis», ha añadido sin dejar de soltar lágrimas. La albaceteña también ha sido reconocida con los premios de Mejor Álbum de Cantautores y Mejor Álbum de Pop Tradicional. Por su parte, la canaria Valeria Castro se ha llevado los de Mejor Canción de Cantautores y Mejor Canción en una banda sonora, por su tema de la película ‘El 47’. Además, la palmera participa como cantante en el tema premiado como Mejor Canción de Electrónica, ‘La ceniza’, de Ale Acosta.
Y también entre las actuaciones de la gala han destacado las mujeres, empezando precisamente por Rozalén y Valeria Castro, que han interpretado juntas un dueto muy delicado y hermoso, una versión de ‘Agua’ de Jarabe de Palo con un cuarteto de cuerda y piano. La otra gran actuación especial ha sido la que casi ha cerrado el espectáculo, una sensacional Amaia junto a Silvia Pérez Cruz cantando a Lorca en la adaptación de ‘Zorongo gitano’.
Uno de los grandes premios de la noche, Mejor Álbum del Año, se lo ha llevado Dani Fernández por ‘La jauría’, pero ha estado ausente, lo cual ha deslucido un poco el logro para un cantante que pasó momentos de incertidumbre tras el final de Auryn, la boy band en la que se dio a conocer hace una década.
Nathy Peluso logró en noviembre tres Grammy Latinos por su disco ‘Grasa’ y esta noche la hispanoargentina ha dominado de manera abrumadora en las categorías urbanas y de rap con los cuatro premios: Mejor Álbum Urbano, Mejor Canción de Rap, Mejor Canción Urbana y Mejor Fusión Interpretación Urbana.
La gala ha empezado con una bofetada cuando Alcalá Norte, premiados como Mejor Nuevo Artista, han tocado la sensacional ‘La vida cañón’. Lo han hecho con Noni de Lori Meyers como invitado, mientras los dos cantantes tiraban al público mendrugos de pan vestidos con camisetas del equipo de fútbol del Granada.
El arranque de la gala ha sido torpe y ha transmitido cierto tufillo cutrón, con María Peláe ganando tiempo mientras se desalojaba el escenario tras las primeras actuaciones y Rodrigo Cuevas abanicándose durante minutos y minutos frente al micrófono, lo que provocaba una molesta brisa intermitente que iba cubriendo sus palabras. Ambos han sido los presentadores y han estado a ratos ocurrentes, pero sus improvisaciones y su rollo de desparpajo canalla no siempre han funcionado. En general, un espectáculo que se presupone que debería haber sido ágil y medido ha caído con frecuencia en la torpeza y ha adolecido de ritmo.
Estopa optaban a dos premios y dos premios se llevaron: Mejor Disco de Pop («No me gusta nada el pop, pero bueno», dijo simpático David Muñoz en su encuentro posterior con la prensa) y Mejor Gira. Estuvieron graciosos, parecieron felices, mostraron su propia sorpresa de llevar 26 años en la música y recordaron estar en unos premios en este mismo espacio cuando eran unos «pipiolos». Ni siquiera recordaron el nombre de aquellos premios del siglo pasado («¿Eran los Amigo»?), y es que estos Premios de la Academia de la Música son el enésimo intento de la industria musical española de consolidar unos galardones que lleguen a tener repercusión nacional y sirvan de escaparate al sector, como lo son los Goya para el cine.
Las categorías de rock se han repartido entre Leiva (Mejor Canción de Rock), que le ha dedicado el premio a su madre («Está ingresada en el hospital») y Biznaga (Mejor Álbum de Rock). Pero incluso el Mejor Álbum de Música Electrónica se lo ha llevado una mujer, Sandra Delaporte.
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