El primero de setiembre de 1951 el primer ministro de Israel, el terrorista David Grüll, ordenó la creación del Mossad una organización de inteligencia separada del Ministerio de Relaciones Exteriores, que hoy en día se encuentra en cada rincón del planeta involucrada en espionaje, sabotajes, tráfico de drogas, prostitución, lavado de dinero y cualquier negocio turbio que pueda existir, eso sí nunca mencionada por ningún miembro del gobierno sionista “la única democracia de oriente medio”.
Aquí en nuestra América Latina han creado grupos terroristas y paramilitares en Cuba, Nicaragua, El Salvador, Guatemala y prácticamente en cada país de esta región, en los años 70 Israel fue el mayor proveedor de armas a los regímenes militares en Centroamérica, en esos años su agencia operaba desde Tegucigalpa, donde era dirigida por un subdirector del Mossad, entrenaron a la contra nicaragüense, así como a los paramilitares y narcotraficantes colombianos, quienes contrataban sus servicios a través de la compañía Sparhead Ltd. que no era más que una fachada creada por el Mossad; la capacitación impartida por exoficiales del ejército israelí, como el muy conocido terrorista de los años 90 Yair Klein, cabe mencionar que en el año 2001 la justifica colombiana condenó a este terrorista a 10 años de prisión, en el 2007 fue detenido en Rusia; sin embargo por un fallo del tribunal europeo de derechos humanos terminó en Israel sin cumplir un día de su sentencia y el caso quedó impune.
En Argentina el paranoico Milei le entregó áreas completas de la inteligencia estatal al Mossad, país donde el sionismo terrorista ha hundido sus garras en la economía, en el aparato productivo y lo más importante, en las enormes riquezas naturales que poseen los argentinos, la Patagonia muy extensa y con grandes recursos está prácticamente bajo su control.
En 2024 hicieron explotar miles de bíperes en el Líbano asesinando a 9 personas y unas 3 mil más heridas, en su gran mayoría civiles y muchos de ellos menores de edad, también han aceptado el haber asesinado varios científicos iraníes.
Estoy seguro de que el nombre de este terrorista, Yair Klein del Mossad sonará muy familiar para muchos aquí en Costa Rica, pues este señor se paseó por Centroamérica por muchos años enseñándole sus tácticas a todo aquel gobierno o grupo terrorista dispuesto a contratar sus servicios. Como sabemos, muchos de los “policías” costarricenses desde hace tiempo son entrenados por tres de los ejércitos más asesinos del mundo EUA, Israel y Colombia. Todos los costarricense de bien debiéramos exigirle al gobierno que nos diga cuántos de estos “policías“ están entre los 17 mil que Chaves dice tener, cuántos de estos entrenados por gringos e israelíes están con el narcotraficante ahora explorando otros campos que se adapten a sus talentos como el de terrorista y mercenario.
(*) Julio César Madrigal Mora, Ciudadano Costarricense
El primero de setiembre de 1951 el primer ministro de Israel, el terrorista David Grüll, ordenó la creación del Mossad una organización de inteligencia separada del Ministerio de Relaciones Exteriores, que hoy en día se encuentra en cada rincón del planeta involucrada en espionaje, sabotajes, tráfico de drogas, prostitución, lavado de dinero y cualquier negocio
El primero de setiembre de 1951 el primer ministro de Israel, el terrorista David Grüll, ordenó la creación del Mossad una organización de inteligencia separada del Ministerio de Relaciones Exteriores, que hoy en día se encuentra en cada rincón del planeta involucrada en espionaje, sabotajes, tráfico de drogas, prostitución, lavado de dinero y cualquier negocio turbio que pueda existir, eso sí nunca mencionada por ningún miembro del gobierno sionista “la única democracia de oriente medio”.
Aquí en nuestra América Latina han creado grupos terroristas y paramilitares en Cuba, Nicaragua, El Salvador, Guatemala y prácticamente en cada país de esta región, en los años 70 Israel fue el mayor proveedor de armas a los regímenes militares en Centroamérica, en esos años su agencia operaba desde Tegucigalpa, donde era dirigida por un subdirector del Mossad, entrenaron a la contra nicaragüense, así como a los paramilitares y narcotraficantes colombianos, quienes contrataban sus servicios a través de la compañía Sparhead Ltd. que no era más que una fachada creada por el Mossad; la capacitación impartida por exoficiales del ejército israelí, como el muy conocido terrorista de los años 90 Yair Klein, cabe mencionar que en el año 2001 la justifica colombiana condenó a este terrorista a 10 años de prisión, en el 2007 fue detenido en Rusia; sin embargo por un fallo del tribunal europeo de derechos humanos terminó en Israel sin cumplir un día de su sentencia y el caso quedó impune.
En Argentina el paranoico Milei le entregó áreas completas de la inteligencia estatal al Mossad, país donde el sionismo terrorista ha hundido sus garras en la economía, en el aparato productivo y lo más importante, en las enormes riquezas naturales que poseen los argentinos, la Patagonia muy extensa y con grandes recursos está prácticamente bajo su control.
En 2024 hicieron explotar miles de bíperes en el Líbano asesinando a 9 personas y unas 3 mil más heridas, en su gran mayoría civiles y muchos de ellos menores de edad, también han aceptado el haber asesinado varios científicos iraníes.
Estoy seguro de que el nombre de este terrorista, Yair Klein del Mossad sonará muy familiar para muchos aquí en Costa Rica, pues este señor se paseó por Centroamérica por muchos años enseñándole sus tácticas a todo aquel gobierno o grupo terrorista dispuesto a contratar sus servicios. Como sabemos, muchos de los “policías” costarricenses desde hace tiempo son entrenados por tres de los ejércitos más asesinos del mundo EUA, Israel y Colombia. Todos los costarricense de bien debiéramos exigirle al gobierno que nos diga cuántos de estos “policías“ están entre los 17 mil que Chaves dice tener, cuántos de estos entrenados por gringos e israelíes están con el narcotraficante ahora explorando otros campos que se adapten a sus talentos como el de terrorista y mercenario.
(*) Julio César Madrigal Mora, Ciudadano Costarricense
Opinión – Diario Digital Nuestro País