San José, 10 Mar (Elpaís.cr).- La renuncia de las diputadas costarricenses Johanna Obando y Cynthia Córdoba al Partido Liberal Progresista (PLP), ocurrida el pasado 6 de marzo, ha generado un efecto dominó que ha llevado a otros 39 miembros del partido a abandonar la agrupación política.
Según fuentes internas, las renuncias se concentran en la provincia de Cartago, donde ambas legisladoras tienen una fuerte base de apoyo.
Las renuncias masivas se producen en un contexto de tensiones internas y externas, particularmente tras la cancelación de las visas estadounidenses de las diputadas el 19 de febrero. Este hecho, vinculado a supuestos lazos con la empresa china Huawei, fue criticado por Obando y Córdoba, quienes acusaron al PLP de no brindarles el respaldo necesario frente a lo que calificaron como un ataque político.
En una carta dirigida al Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) y al Comité Ejecutivo Nacional del PLP, los 39 renunciantes expresaron su descontento con la falta de apoyo hacia la labor de la diputada Obando y la “evidente desvinculación del partido con los principios y compromisos que originalmente nos convocaron”.
El documento, firmado por regidores, síndicos, concejales y otros líderes de Cartago, señala que Obando ha sido la única congresista que ha respaldado de manera constante a las bases partidarias en la provincia.
Falta de respaldo
Las diputadas Obando y Córdoba han sido voces críticas del gobierno costarricense en temas como la implementación de la tecnología 5G y la exclusión de empresas chinas en el proceso de licitación.
Ambas relacionaron la cancelación de sus visas con la visita a Costa Rica del secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, a principios de febrero, quien advirtió sobre sanciones a funcionarios locales que mantuvieran vínculos con empresas chinas.
“Cynthia y yo no estamos aquí diciendo que queremos las visas. El asunto está en que el comunicado de prensa por parte de la fracción fue un comunicado débil, en el que prácticamente nos dejan solas en esta batalla”, declaró Obando en entrevista con Semanario Universidad.
La legisladora criticó la falta de respaldo del PLP frente a lo que describió como “violencia política” y un intento del gobierno de acallar a la oposición.
Reacción en cadena
Entre los renunciantes destacan Alonso González, alcalde de Bagaces, y Diego Vega, vicealcalde del mismo cantón, quienes confirmaron su salida del partido.
Inicialmente, se informó que la vicealcaldesa Natalia Salazar también abandonaría la agrupación, pero posteriormente se aclaró que, por el momento, permanecerá en el PLP.
La diputada Obando explicó que su decisión de renunciar al partido fue motivada por una serie de desacuerdos administrativos y la falta de apoyo en momentos clave. “Si en algo tan medular como la defensa de la democracia y de un estado soberano como es el de Costa Rica no nos apoyan, ¿qué más queda?”, cuestionó.
Impacto en las relaciones internacionales
La cancelación de las visas estadounidenses también ha generado reacciones en el ámbito político nacional. El presidente de la Asamblea Legislativa, Rodrigo Arias, calificó la medida como un acto que “ensombrece” las relaciones entre Costa Rica y Estados Unidos, y pidió a Washington reconsiderar la decisión.
Por su parte, la auditora del Instituto Costarricense de Electricidad, Ana Sofía Machuca, quien también fue afectada por la revocación de su visa, denunció que la medida constituye un “grave atentado contra nuestra soberanía y libertad de expresión”. Machuca aclaró que su labor como auditora desde 2017 ha estado libre de presiones externas o políticas.
Un partido en crisis
La oleada de renuncias ha dejado al PLP en una situación delicada, con una fractura evidente en su base de apoyo en Cartago y cuestionamientos sobre su capacidad para mantener la unidad interna.
Mientras tanto, las diputadas Obando y Córdoba han anunciado que continuarán su labor como legisladoras independientes, prometiendo mantener una oposición firme frente a lo que consideran un avance del autoritarismo en Costa Rica.
“Tanto la diputada Córdoba como yo seguiremos siendo la oposición que hemos venido siendo desde hace bastantes meses, aún con más fuerza, porque aquí hay un tema país”, concluyó Obando.
San José, 10 Mar (Elpaís.cr).- La renuncia de las diputadas costarricenses Johanna Obando y Cynthia Córdoba al Partido Liberal Progresista (PLP), ocurrida el pasado 6 de marzo, ha generado un efecto dominó que ha llevado a otros 39 miembros del partido a abandonar la agrupación política. Según fuentes internas, las renuncias se concentran en la
San José, 10 Mar (Elpaís.cr).- La renuncia de las diputadas costarricenses Johanna Obando y Cynthia Córdoba al Partido Liberal Progresista (PLP), ocurrida el pasado 6 de marzo, ha generado un efecto dominó que ha llevado a otros 39 miembros del partido a abandonar la agrupación política.
Según fuentes internas, las renuncias se concentran en la provincia de Cartago, donde ambas legisladoras tienen una fuerte base de apoyo.
Las renuncias masivas se producen en un contexto de tensiones internas y externas, particularmente tras la cancelación de las visas estadounidenses de las diputadas el 19 de febrero. Este hecho, vinculado a supuestos lazos con la empresa china Huawei, fue criticado por Obando y Córdoba, quienes acusaron al PLP de no brindarles el respaldo necesario frente a lo que calificaron como un ataque político.
En una carta dirigida al Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) y al Comité Ejecutivo Nacional del PLP, los 39 renunciantes expresaron su descontento con la falta de apoyo hacia la labor de la diputada Obando y la “evidente desvinculación del partido con los principios y compromisos que originalmente nos convocaron”.
El documento, firmado por regidores, síndicos, concejales y otros líderes de Cartago, señala que Obando ha sido la única congresista que ha respaldado de manera constante a las bases partidarias en la provincia.
Falta de respaldo
Las diputadas Obando y Córdoba han sido voces críticas del gobierno costarricense en temas como la implementación de la tecnología 5G y la exclusión de empresas chinas en el proceso de licitación.
Ambas relacionaron la cancelación de sus visas con la visita a Costa Rica del secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, a principios de febrero, quien advirtió sobre sanciones a funcionarios locales que mantuvieran vínculos con empresas chinas.
“Cynthia y yo no estamos aquí diciendo que queremos las visas. El asunto está en que el comunicado de prensa por parte de la fracción fue un comunicado débil, en el que prácticamente nos dejan solas en esta batalla”, declaró Obando en entrevista con Semanario Universidad.
La legisladora criticó la falta de respaldo del PLP frente a lo que describió como “violencia política” y un intento del gobierno de acallar a la oposición.
Reacción en cadena
Entre los renunciantes destacan Alonso González, alcalde de Bagaces, y Diego Vega, vicealcalde del mismo cantón, quienes confirmaron su salida del partido.
Inicialmente, se informó que la vicealcaldesa Natalia Salazar también abandonaría la agrupación, pero posteriormente se aclaró que, por el momento, permanecerá en el PLP.
La diputada Obando explicó que su decisión de renunciar al partido fue motivada por una serie de desacuerdos administrativos y la falta de apoyo en momentos clave. “Si en algo tan medular como la defensa de la democracia y de un estado soberano como es el de Costa Rica no nos apoyan, ¿qué más queda?”, cuestionó.
Impacto en las relaciones internacionales
La cancelación de las visas estadounidenses también ha generado reacciones en el ámbito político nacional. El presidente de la Asamblea Legislativa, Rodrigo Arias, calificó la medida como un acto que “ensombrece” las relaciones entre Costa Rica y Estados Unidos, y pidió a Washington reconsiderar la decisión.
Por su parte, la auditora del Instituto Costarricense de Electricidad, Ana Sofía Machuca, quien también fue afectada por la revocación de su visa, denunció que la medida constituye un “grave atentado contra nuestra soberanía y libertad de expresión”. Machuca aclaró que su labor como auditora desde 2017 ha estado libre de presiones externas o políticas.
Un partido en crisis
La oleada de renuncias ha dejado al PLP en una situación delicada, con una fractura evidente en su base de apoyo en Cartago y cuestionamientos sobre su capacidad para mantener la unidad interna.
Mientras tanto, las diputadas Obando y Córdoba han anunciado que continuarán su labor como legisladoras independientes, prometiendo mantener una oposición firme frente a lo que consideran un avance del autoritarismo en Costa Rica.
“Tanto la diputada Córdoba como yo seguiremos siendo la oposición que hemos venido siendo desde hace bastantes meses, aún con más fuerza, porque aquí hay un tema país”, concluyó Obando.
Nacionales – Diario Digital Nuestro País