Alajuelense golpeó a Saprissa con tremendo tifo en la bienvenida del juego
El Clásico Nacional comenzó con fuerza dentro y fuera de la cancha.
La afición de Liga Deportiva Alajuelense llenó el Estadio Alejandro Morera Soto y mandó un mensaje directo al eterno rival:
una enorme manta desplegada en la gradería este con la frase “La pasión no se vende”.
El tifo rojinegro se convirtió en la postal del arranque, justo cuando los equipos saltaron al terreno de juego.
El mensaje, claro y contundente, parecía tener un destinatario específico: el Deportivo Saprissa, que atraviesa un momento delicado en materia financiera.
Un mensaje con contexto
Según los últimos estados financieros del club tibaseño, Saprissa mantiene una deuda crediticia de aproximadamente $18 millones y un endeudamiento total consolidado que ronda los $33 millones.
Por esa razón, la dirigencia ha reconocido estar en búsqueda de nuevos inversionistas para reforzar la estructura económica del equipo.
La frase del tifo rojinegro hace alusión directa a esa situación.
Un recordatorio de que la identidad y la pasión no se negocian, en un estadio repleto que rugía con cánticos y bengalas al ingreso de los jugadores.
Saprissa, vale recordar, fue vendido en el 2004 al empresario mexicano Jorge Vergara, quien más tarde, en 2011, transfirió el 51% de las acciones al grupo Horizonte Morado, actual dueño del club.
Mientras en las gradas se desplegaba la manta gigante, la afición manuda coreaba con fuerza el tradicional “¡La Liga, la Liga!”, marcando así el inicio de un clásico que promete dejar historia.

Golazo de Kenyel Mitchell
Y el mensaje no solo quedó en las tribunas.
En el campo, Alajuelense también golpeó primero, con un gol de gran factura de Kenyel Mitchell, quien abrió el marcador tras una jugada colectiva que desarmó la zaga morada.
La acción comenzó con una recuperación de Guillermo Villalobos, que avanzó con determinación desde su propio campo, dejando rivales atrás hasta llegar al medio sector.
Luego filtró un pase perfecto que rompió la última línea del Saprissa y encontró a Mitchell, quien definió con frialdad: un toque sutil por encima de Esteban Alvarado, un auténtico “bañito” digno de clásico.
El Morera Soto estalló.
En las gradas, la bandera rojinegra ondeaba con orgullo; en la cancha, la Liga mostraba intensidad, ritmo y una convicción que se sintió desde la primera jugada.

Una noche de mensaje y fútbol
El tifo, el ambiente y el gol de Mitchell sellaron un arranque soñado para los manudos.
Más que una bienvenida al clásico, fue una declaración de principios, tanto dentro del campo como fuera de él:
mientras Saprissa busca estabilidad financiera, Alajuelense presume estabilidad deportiva, identidad y unión con su gente.
El Morera Soto fue una fiesta rojinegra.
Y si algo quedó claro desde el primer minuto, es que la pasión, al menos en Alajuela, no se vende.
La pasión no se vende
@JoMorelli pic.twitter.com/AoCJZjXvyv
— TD Más (@tdmascrc) October 20, 2025
Alajuelense golpeó a Saprissa con tremendo tifo en la bienvenida del juego
El Clásico Nacional comenzó con fuerza dentro y fuera de la cancha.La afición de Liga Deportiva Alajuelense llenó el Estadio Alejandro Morera Soto y mandó un mensaje directo al eterno rival:una enorme manta desplegada en la gradería este con la frase “La pasión no se vende”. El tifo rojinegro se convirtió en la postal del
Ferlin Fuentes
El Mundo CR
Alajuelense golpeó a Saprissa con tremendo tifo en la bienvenida del juego
El Clásico Nacional comenzó con fuerza dentro y fuera de la cancha.
La afición de Liga Deportiva Alajuelense llenó el Estadio Alejandro Morera Soto y mandó un mensaje directo al eterno rival:
una enorme manta desplegada en la gradería este con la frase “La pasión no se vende”.
El tifo rojinegro se convirtió en la postal del arranque, justo cuando los equipos saltaron al terreno de juego.
El mensaje, claro y contundente, parecía tener un destinatario específico: el Deportivo Saprissa, que atraviesa un momento delicado en materia financiera.
Un mensaje con contexto
Según los últimos estados financieros del club tibaseño, Saprissa mantiene una deuda crediticia de aproximadamente $18 millones y un endeudamiento total consolidado que ronda los $33 millones.
Por esa razón, la dirigencia ha reconocido estar en búsqueda de nuevos inversionistas para reforzar la estructura económica del equipo.
La frase del tifo rojinegro hace alusión directa a esa situación.
Un recordatorio de que la identidad y la pasión no se negocian, en un estadio repleto que rugía con cánticos y bengalas al ingreso de los jugadores.
Saprissa, vale recordar, fue vendido en el 2004 al empresario mexicano Jorge Vergara, quien más tarde, en 2011, transfirió el 51% de las acciones al grupo Horizonte Morado, actual dueño del club.
Mientras en las gradas se desplegaba la manta gigante, la afición manuda coreaba con fuerza el tradicional “¡La Liga, la Liga!”, marcando así el inicio de un clásico que promete dejar historia.

Golazo de Kenyel Mitchell
Y el mensaje no solo quedó en las tribunas.
En el campo, Alajuelense también golpeó primero, con un gol de gran factura de Kenyel Mitchell, quien abrió el marcador tras una jugada colectiva que desarmó la zaga morada.
La acción comenzó con una recuperación de Guillermo Villalobos, que avanzó con determinación desde su propio campo, dejando rivales atrás hasta llegar al medio sector.
Luego filtró un pase perfecto que rompió la última línea del Saprissa y encontró a Mitchell, quien definió con frialdad: un toque sutil por encima de Esteban Alvarado, un auténtico “bañito” digno de clásico.
El Morera Soto estalló.
En las gradas, la bandera rojinegra ondeaba con orgullo; en la cancha, la Liga mostraba intensidad, ritmo y una convicción que se sintió desde la primera jugada.

Una noche de mensaje y fútbol
El tifo, el ambiente y el gol de Mitchell sellaron un arranque soñado para los manudos.
Más que una bienvenida al clásico, fue una declaración de principios, tanto dentro del campo como fuera de él:
mientras Saprissa busca estabilidad financiera, Alajuelense presume estabilidad deportiva, identidad y unión con su gente.
El Morera Soto fue una fiesta rojinegra.
Y si algo quedó claro desde el primer minuto, es que la pasión, al menos en Alajuela, no se vende.
La pasión no se vende
@JoMorelli pic.twitter.com/AoCJZjXvyv
— TD Más (@tdmascrc) October 20, 2025
Deporte nacional e internacional
