<p>La Policía Nacional investiga ya los presuntos abusos sexuales cometidos por un catedrático de clarinete que propiciaron <a href=»https://www.elmundo.es/cultura/2025/11/26/69272c5fe4d4d89f458b4585.html» target=»_blank»>la protesta de los alumnos del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid (RCSMM)</a> en plena celebración del Acto Académico con motivo de la festividad de Santa Cecilia que se celebró el pasado 26 de noviembre. El acusado, <strong>Pedro Garbajosa</strong>, subió al escenario a recibir una insignia como reconocimiento a 20 años de servicio al centro cuando varias decenas de estudiantes prorrumpieron en gritos y desplegaron una pancarta que rezaba: <strong>«Fuera abusadores del conservatorio»</strong>. </p>
La Policía Nacional abre de oficio una investigación al catedrático de clarinete del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid acusado de tocamientos y comentarios obscenos a sus alumnas
La Policía Nacional investiga ya los presuntos abusos sexuales cometidos por un catedrático de clarinete que propiciaron la protesta de los alumnos del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid (RCSMM) en plena celebración del Acto Académico con motivo de la festividad de Santa Cecilia que se celebró el pasado 26 de noviembre. El acusado, Pedro Garbajosa, subió al escenario a recibir una insignia como reconocimiento a 20 años de servicio al centro cuando varias decenas de estudiantes prorrumpieron en gritos y desplegaron una pancarta que rezaba: «Fuera abusadores del conservatorio».
Según ha podido confirmar EL MUNDO de fuentes de la Consejería de Educación, de la que depende el centro, las diligencias policiales están ya en marcha. «La actuación administrativa de la Inspección Educativa de la Comunidad de Madrid sigue su curso, y tanto este cuerpo independiente como la dirección del centro están colaborando en las diligencias policiales que ya se han abierto de oficio para investigar lo ocurrido», afirman esas fuentes.
Los testimonios recogidos por este periódico a través de numerosos alumnos refieren comportamientos inapropiados por parte del profesor, que tiene, además, abierto un expediente administrativo por falta grave o muy grave tras la denuncia de dos estudiantes por acoso en redes sociales. Es la única denuncia formal que figura contra él; las alumnas rechazan dirigirse a las autoridades o a la dirección del centro por miedo a represalias.
«Me abrazó por detrás y metió las manos bajo mis costillas. Dijo que era para controlar mi respiración, nunca antes un profesor me había tocado de esa manera», aseguraba una de las alumnas de clarinete que solicitó el cambio de profesor. «Estás sola con él en clase, imagínate, es muy violento. La primera vez que pasó le dije que no me gustaba que me tocara, pero después de mantenerse un tiempo más distanciado volvió a hacerlo. Fue ahí cuando ya no pude más».
«El ambiente era muy violento, no sólo por sus comentarios de tipo sexual sino también por su forma de humillarte. Cuando hacía algo bien, me decía: ‘Ten cuidado, que se me empina’. Cuando hacía algo mal, me espetaba que no valía para nada, que era una mierda», afirma otra alumna. «Se puso muy agresivo cuando le dije que iba a solicitar el cambio de profesor. Pensé en denunciarlo, claro, pero no lo hice por miedo».
El pasado viernes, los representantes de los alumnos registraron una solicitud de actuación de oficio por parte del Conservatorio. «La pelota está en el tejado de la Dirección, no en el de las alumnas», avisaba el escrito. La directora del RCSMM, Consuelo de la Vega, alegó en respuesta que había puesto en conocimiento de la Inspección las acusaciones. «Todo lo que teníamos que hacer está hecho, lo hemos puesto en conocimiento de la Inspección», dijo a este diario.
El puesto que deja vacante el catedrático Pedro Garbajosa, de baja médica permanente, ya ha sido cubierto. Por su parte, el acusado, que niega tajantemente los hechos, ha hecho circular entre sus pupilos presentes y pasados vía WhastApp una carta abierta de apoyo «pleno e incondicional» frente a «unas acusaciones injustas y perjudiciales para su honor, y su dignidad personal».
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